La mayoría de las veces que se recibe un masaje, el organismo y el cuerpo responden a una estimulación externa, placentera y sensual.

El cuerpo lo demuestra por la extrema sensibilidad de la piel, que al ser estimulada ocasiona la sensación de placer.

En el hombre es visible esa sensación, externamente a travez de una erección espontánea. La cual es normal y natural, no deben sentirse mal con esa exposición.

Para que se continue con el placer, avanzamos a un masaje íntimo manual. Que puede ser indivual en zona erógena (pene, anal-próstata) o combinado.

El descubrir tus zonas de estimulación, ayuda en tu potencial sexual, orgásmico y para control de la eyaculación. Recomendado para exigentes y quienes quieren experimentar. Ayuda a mejorar tus relaciones sexuales haciéndolas mas extensas y placenteras.

Este masaje se lo conoce como con Final Feliz.